En sesión ordinaria, el Grupo Parlamentario del PAN presentó una iniciativa de reforma al Código Penal para el Estado de Guanajuato, para ampliar las sanciones a quien robe ganado y agave.

En la exposición de motivos, el diputado Paulo Bañuelos Rosales señaló que se busca incluir dentro del robo calificado aquel que se cometa sobre productos agrícolas, incluido el hijuelo de agave, cuando el monto de lo robado alcance o supere el equivalente a 50 días de salario mínimo, es decir, aproximadamente 6 mil pesos, a cifras del 2020.

Precisó que dicha conducta, de acuerdo con el monto de lo robado, sería sancionada con una pena de hasta 15 años de prisión.

Asimismo, detalló que se pretende aumentar las penas correspondientes al delito de robo de ganado, para que sean de hasta 10 años, y elevar hasta un máximo de 8 años el castigo de prisión para quienes, sabiendo del origen ilícito del ganado robado, lo sacrifiquen, vendan, transporten o custodien sin el consentimiento de quien legalmente pueda disponer de dicho ganado.

“Con estas modificaciones al Código Penal, reafirmaremos nuestra invencible solidaridad con las familias del campo, cuya tranquilidad, patrimonio y trabajo debemos defender con todo el peso de la ley, para que la vocación agropecuaria siga siendo un orgullo que proyecta a Guanajuato en los mercados de México y de todo el mundo”, acentuó.

El diputado comentó que, en el caso específico del robo de ganado, Guanajuato ocupa el sexto lugar a nivel nacional y en los primeros seis meses de 2018, el Secretariado del Sistema Nacional de Seguridad Pública del gobierno federal registró 134 casos de este delito.

Al respecto, explicó que normalmente en cada uno de los robos de ganado se sustraen al menos 10 cabezas de ganado, lo que resulta perjudicial para los productores, pues aproximadamente el costo de cada vaca puede llegar a los 25 mil pesos, el de cada borrego a los 12 mil y el de cada toro alcanza hasta los 60 mil pesos.

Además, mencionó que, de acuerdo con el Instrumento para el Registro, Clasificación y Reporte de los Delitos y las Víctimas, a partir de enero de 2018 se empezaron a registrar robos de ganado con violencia, provocando una situación de alerta y de justificada indignación entre las familias que se dedican al sector ganadero.

“Es necesario castigar de manera más contundente a quienes han convertido al robo de agave y de ganado en un lastre para la industria agroalimentaria y en una preocupación permanente para miles de familias que sí están trabajando con honestidad para construirse un futuro mejor a través de la labranza de sus campos y el cuidado de sus animales”, finalizó.

La iniciativa se turnó a la Comisión de Justicia para su estudio y dictamen.