El Obispo Emérito de Irapuato, José de Jesús Martínez Zepeda, celebró su onomástico, sin importarle la pandemia del coronavirus.

La feligresía le llevó un pastel, globos y hasta mariachi; la celebración se dio en la calle, pese a que estas actividades están prohibidas.

El Obispo Emérito portaba cubrebocas, al igual que los feligreses, no así los mariachis que cantaron por más de una hora.

José de Jesús Martínez Zepeda de hecho sacó una mesa de plástico a la calle para colocar el pastel que le regalaron; posteriormente lo repartió.

Cabe hacer mención que por la mañana, su sucesor, Enrique Díaz Díaz, celebró una misa en el templo del Sagrado Corazón de Jesús, situación que también está prohibida.

Policías y personal de Fiscalización tuvieron que acudir al templo en la colonia Independencia para su clausura.